El uso de una venda es una práctica donde se cubren los ojos de una persona, impidiéndole ver. Este acto puede cambiar la dinámica de poder, permitiendo que la otra persona tome más control. Puede ser beneficioso para individuos que son tímidos, ya que puede aliviar la ansiedad de rendimiento. Además, puede añadir un elemento de sorpresa y emoción a la experiencia.